Coppel y Calderón acordaron con Rajoy y Feijóo los contratos a nombre de Pemex con los astilleros gallegos. Los propios políticos españoles lo han hecho público. Tales contratos están firmados y van por más. No solo hay opacidad sino corrupción.
Balón de oxígeno: Rajoy
El presidente del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, aseguró que pronto se firmarán nuevos contratos entre Pemex y empresas del sector naval gallego, alianza que calificó de balón de oxígeno para las deprimidas empresas astilleras y para la región, asfixiada por el desempleo y la recesión económica. La información fue complementada por el titular de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, quien advirtió que una vez firmados los contratos por los dos floteles, ahora su objetivo es conseguir algún barco de esos 130 que necesita Pemex en los próximos años (Tejeda A.G, en La Jornada, p.26, 2 oct 2012).
La información publicada por el corresponsal en España del diario mexicano La Jornada refiere que, mientras en México persiste la opacidad en torno a los contratos firmados por Juan José Suárez Coppel, director de Pemex, con dos astilleros gallegos –Navantia, que es propiedad del Estado, y Los Hijos de Barreras–, en Madrid Rajoy y su compañero de partido y presidente gallego, Núñez Feijóo se presentaron en un céntrico hotel madrileño para hacer campaña proselitista a favor del derechista Partido Popular (PP) ante un foro madrileño de debate, de cara a los comicios regionales del 21 de octubre.
En ese evento, Rajoy reconoció que él mismo había participado en las negociaciones y labores diplomáticas para que Pemex firmara los contratos con los astilleros gallegos, y también para que se firmara la llamada alianza estratégica, que hasta la fecha ni los interlocutores de España ni de México han querido explicar en detalle.
Cabildeo de Rajoy y Nuñez Feijóo
El periodista Tejeda recordó que en el primer viaje a América Latina como presidente, Mariano Rajoy visitó México como primer destino y en ese trayecto se incorporó, de última hora, el presidente de Galicia, que ya tenía la intención de lograr esos acuerdos comerciales millonarios con Petróleos Mexicanos.
Con la intermediación del empresario gallego Olegario Vázquez Raña, afincado en territorio mexicano, Núñez Feijóo se reunió con los directivos de Pemex mientras Rajoy departió con Felipe Calderón, con quien también abordó el asunto del apoyo de Pemex a la industria naviera gallega, que en los últimos cinco años no había firmado ningún contrato.
Así lo explicó Rajoy: Núñez Feijóo defendió los intereses de Galicia fuera de sus fronteras, algo que yo he seguido de cerca y en algunas ocasiones vivido con él. Por poner un solo ejemplo: la firma de dos contratos con la empresa pública mexicana Pemex ha sido un balón de oxígeno para el sector naval gallego, que como saben ustedes pasa por dificultades. Y además de un balón de oxígeno ha sido el prólogo de nuevos contratos que sin duda habrá, y pronto, en el futuro.
Los contratos están firmados
Núñez Feijóo consideró que no es serio que se intente debatir o investigar sobre la firma de los contratos, al recurrir a la supuesta luz y taquígrafos de la firma ante los medios de comunicación gallegos, que sí asistieron a la firma el pasado 19 de septiembre, pero que en ningún momento tuvieron acceso al documento del contrato, que contiene una serie de cláusulas de confidencialidad que exigen mantener en secreto la operación. Yo no tengo ningún inconveniente en que se enseñen esos contratos, advirtió.
“Es evidente que se han firmado dos contratos, de dos buques o floteles, de hecho uno de ellos firmado con Navantia, que es una empresa pública. Y aquí quiero decir que no veo a dos empresas públicas engañándose entre sí y engañando a los países que representan.
Entonces los contratos están firmados con PMI o Pemex Internacional, que es la que compra barcos y, posteriormente, si lo considera oportuno, PEP los puede alquilar (sic). Pero una empresa filial del grupo Pemex ha comprado dos barcos en Galicia. Y yo fui testigo presencial porque he visto cómo se firmaban las 43 hojas de contrato”, declaró Núñez Feijóo ante preguntas expresas de la prensa mexicana.
Advirtió que a partir de ahora se centrarán en lograr más y nuevos contratos, tal como confirmó el propio Rajoy: El director general dijo que entre 2013 y 2018 necesita más de 130 nuevos barcos, así que lo que nosotros tenemos que hacer es conseguir algún barco de esos 130, porque los dos barcos que ya hemos contratado ya no forman parte del futuro.
Inconsistencias de Coppel
Pemex confirmó que el pasado 24 de mayo firmó un memorando de entendimiento de colaboración con la Xunta de Galicia para la construcción de remolcadores (siete en Galicia y siete de forma conjunta con astilleros mexicanos), siempre que se den las condiciones de calidad, precio y oportunidad (Rodríguez ., en La Jornada, p.26, 2 oct 2012):
Lo anterior contrasta con las declaraciones del director general de Pemex, quien en conferencia de prensa y ante los representantes de los principales astilleros mexicanos, aseguró que se construiría en México todo lo que se pudiera construir.
Los 14 remolcadores que ahora Pemex pretende sustituir fueron construidos en su totalidad por astilleros mexicanos, por lo que no se justifica que la paraestatal pretenda distribuir la construcción de los remolcadores entre España y México.
Durante la conferencia de prensa celebrada la semana pasada, Tomás Fernández, del astillero Gran Península, en Ensenada, y Valle de Los Astilleros, aseveró: “para la construcción de las embarcaciones menores, los 14 remolcadores se pueden hacer aquí en México, en astilleros mexicanos, Pemex se ha comprometido con nosotros a hacerlos aquí.
Pero la realidad es que desde el 24 de mayo Pemex ya había firmado un memorando de entendimiento con los astilleros gallegos para construir al menos siete remolcadores en Galicia, España.
Política petrolera antinacional
Coppel sigue una política contraria al interés de Pemex y de la nación. Con recursos públicos hace negocios particulares en España, apoyando a un gobierno criminal, sin siquiera cuidar las formas, engañando flagrantemente a los mexicanos. A todos miente. No solo hay opacidad sino corrupción.