Amalia Avendaño
San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, 24 de noviembre.- Contento, animado sin actitudes revanchistas o intenciones de festinar en contra de nadie pero si de reconocer “este triunfo del movimiento democrático y social por la defensa de los derechos humanos que logró que el gobierno tuviera voluntad política para dar salida a estos problemas a través de la negociación y el diálogo,”, Chema se reunión con sus compañeros en esta ciudad.
El líder recibió una lluvia de aplausos, abrazos, besos, confeti, globos y cohetes de quienes durante un mes esperaron sufriendo la implacable intemperie de la Ciudad su retorno a Chiapas para poder regresar a sus comunidades en Venustiano Carranza.
Antes del festejo en la emblemática cruz de la plaza Catedral, José Manuel Hernández Martínez, junto con Roselio de la Cruz y José Manuel de la Torre, pasaron a saludar a los 17 indígenas que desde el 30 de octubre se posesionaron de las oficinas del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), una visita también muy alegre.
La tristeza y lagrimas llegaron después, al visitar en el hospital a José Santos Aguilar, uno de los lesionados en el “accidente” de transito en el que murieron Jordán López Aguilar y Bayardo Hernández de la Cruz, por tratar de rescatar a Chema el día que lo arrestaron.
De la situación del “Compa José” y de la indemnización a las familias de los fallecidos, se trató en la reunión que tuvieron los 3 liberados con el gobernador Juan Sabines Guerrero, en una encuentro donde el mandatario se portó “como siempre, muy amable, muy amigable”, informó.
Sin cansarse de responder las preguntas de la prensa y contar a sus compañeros todo lo que vivió en los últimos 55 días, relató que anoche luego de bajar del avión en compañía de el presidente del PRD Alejandro Gamboa que lo trasladó desde el penal de Nayarit -a donde habia sido ingresado el 16 de octubre-, se reencontró con su 2 compañeros recien salidos de El Amate, en el Palacio de Gobierno para platicar con Sabines Guerrero.
-¿De que hablaron?
-De antemano hay una propuesta para iniciar las mesas de negociación a partir del jueves, pero bueno la decisión es de la organización que pedimos primero la liberación de los presos y posteriormente se sentará a negociar los demás problemas, eso es lo que vamos a comentar entre nosotros, depende de lo que acordemos con los compañeros del plantón.
Aseguró que el gobernador hizo “el compromiso de palabra de que ninguna otra orden se va a ejecutar en contra de la OCEZ. Está la propuesta de varias mesas (de trabajo), es la propuesta del gobernador. El gobierno dijo que hay voluntad política de atender las demandas”.
Explicó que hubo desistimiento de la acción penal por el delito de asociación delictuosa que se considera grave y por los delitos de daños y despojo fueron liberados bajo fianza que pagó el gobierno del estado.
--¿Cómo te sientes? –ante esta pregunta la voz se le quebró a Chema mientras acariciaba la cabeza de una pequeña que lo miraba dentro del rebozo a la espalda de su mamá-.
-- Me siento como siempre con el mismo ánimo para seguir luchando por aquellos niños que se están muriendo de hambre en las comunidades.
--¿Allá adentro, pensabas en el tiempo que estaría preso?
-Siempre tuve confianza en la organización en la movilización del pueblo. Esa ha sido mi confianza. Nunca para un preso político hay un tiempo determinado, todo depende de las condiciones políticas en que se muevan las organizaciones y la solidaridad nacional e internacional. En este caso sentí que nunca estuvimos solos. Siempre tuve la confianza aunque no sabía cuando pero que iba a tener la libertad, como ahora.
A sus 56 años de edad, con más de 30 años en la lucha social básicamente por reivindicaciones agrarias y con un historial de 4 ingresos a la cárcel, Chema sostuvo que el objetivo de esta reciente persecución a la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ) “era aniquilar a nuestra organización”.
“ La represión no es la solución ni la compra de líderes para la solución de los problemas; la solución es resolver las necesidades de la s comunidades, lo agrario es la raíz del problema”, dijo.
Sabedor de que cada sábado el y los otros dos liberados deben acudir a firmar ante el juez, expresó que el temor a la represión “siempre va a seguir porque sabemos que dentro de todo esto hay gente también que quiere algo más que lo que nos pasó, una represión más fuerte y si es posible una masacre como la de Acteal o Chincultic para que ellos saquen provecho político en estas contiendas electorales y nos quieren utilizar como carne de cañón”.
Agradeció la solidaridad, de los medios de comunicación, de las organizaciones sociales y todos quienes participaron en el proceso para lograr su liberación “lo que importaba era parar la represión indiscriminada que se estaba dando en contra de una organización histórica que ha tenido que pagar cuotas elevadas de sangre y la caída de compañeros”.
Reiteró que la OCEZ “no es de delincuentes sino de indígenas que luchan por un pedazo de tierra. Tenemos que aprender que la lucha es difícil, larga pero sí se puede con la unidad de todos”